
Y toca todas las artes…. y se atreve con todo. Lo mismo te fríe una camisa que te plancha un huevo. Qué te pueden leer las líneas de una mano, pero Román va más allá y saca acordes de una hoja de un Olmo. Y lo curioso es que lo hace con luz, que trabaja con instrumentos, que para sí ya quisiera el mismísimo Cartier Bresson. ( No es un reloj)